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Desde temprana edad el niño se manifiesta a través de los garabatos, dibujos y luego las líneas, etapas que contemplan un sinfín de beneficios. La escritura,comandada por el cerebro, constituye un canal de desarrollo y de descargas fortuitas del «Yo» del niño.

Luego va madurando neuromuscularmente y ejecutando nuevas formas, que se relacionan con el «Yo-otros».

Es fundamental guiar hacia la creatividad aportando soportes, lápices y diversas pinturas de variados colores. Para los más pequeños también se puede optar por el uso de sus dedos como herramienta de escritura (dactilopintura) o crayones, para afirmar su musculación. Este método,además, es una forma de descargar sus emociones muy divertido. Es menester resaltar que el instrumento escribiente tiene que ser adecuado a la edad en cuanto a su composición, estructura y peso.

La niñez es el momento propicio para ejercitar el buen hábito de la escritura manuscrita; desde el modo correcto de sentarse, de como tomar el lapicero, la posición de la hoja, el respeto por las pautas. Todo esto ayuda a ver el potencial del niño, guiarlo correctamente de acuerdo a sus necesidades (por ejemplo,si es zurdo) y es la mejor etapa para detectar factores de su aprendizaje u otros para comenzar a tratar con algún profesional.Todo esto ayuda al propio conocimiento del niño y su aceptación.

Más adelante el tratar de orientarlos hacia una escritura clara, legible, etc. ayuda al chico a adaptarse a la vida en sociedad, a seguir reglas,a organizarse.

Dada la importancia del desarrollo de la escritura para el desarrollo del niño, no tenemos que descuidarla. Es real que la computación tiene su enrequicimiento. Simplemete hay que saber darle espacio al niño para cada actividad, para que sea un equilibrio.Así como la escritura apoya su atención, concentración, orden, desarrollo de ideas y creatividad; la computadora -bien usada- puede acompañar este paso tan importante.

Es fundamental elegir páginas de contenido didáctico para su edad, que lo incentiven a su crecimiento, como puede ser también la lectura y por qué no la televissión. Hay muchas posturas contrarias al respecto, pero desde mi punto de vista -como profesional y madre- consiento que el tema está en que el niño «juegue» con todo, un rato a cada cosa. El extremo es el abuso… si nos descuidamos y el niño se encuentra todo el día, todos los días, frente a la computadora, ahí está el riesgo de trabarle un paso de su desarrollo, de coartarle su originalidad y fantasía, de apartarlo de las vías de comunicación. La palabra concluyente: prudencia!.

La escritura es un gran juego para los niños… y la computadora puede ponerse de nuestro lado! No importa los donde, cuando, con qué… lo fundamental es que los chicos dibujen, que escriban y que no alteren su etapa de niñez.